[Review] On The Edge – Frostpunk DLC

Ha llegado un nuevo mapa a Frostpunk, On to the Edge, un DLC muy complicado de jugar y con muchas cosas para prestar atención.

Para el que no conoce Frostpunk, es un título de administración y estrategia, donde frente a un invierno polar a nivel mundial tenemos que administrar una ciudad con una caldera para mantener calientes a nuestros habitantes. Para poder mantener el calor tenemos que obtener recursos, el carbón es uno de los más importantes pero no es el único, también obtendremos acero, madera, núcleos de vapor.

En este nuevo DLC On the Edge todo cambiará a lo que estábamos acostumbrados. El equipo de desarrollo 11 Bit Studios al parecer quiere cerrar una etapa con esta última actualización de contenido. Aquí deberemos asumir el papel de un equipo de avanzada de Nueva Londres, para ello debemos extraer acero de un antiguo depósito militar pero el problema es que no habrá alimento, muy poco carbón y madera.

El campamento se ubica al lado de una montaña al borde al abismo (on the edge), esto hace que haya poco lugar para construir, pocos recursos y tengamos que planificar todo lo que hacemos con mucho más cuidado. Para poder avanzar en el mapa tendremos que establecer comunicación con Nueva Londres, sin ello no sobreviviremos ya que como mencionaba «no hay comida», el recurso más difícil de conseguir en este mapa.

Las tecnologías en este nuevo mapa son muy limitadas, primero que no serán las mismas que en Nueva Londres lo que nos perjudica mucho, pero además, como estaremos siempre con pocos recursos todo será muy complicado de investigar. Por otro lado, el libro de leyes no estará disponible, al menos al principio, ya que una opción que nos da el juego es la de independizarnos de Nueva Londres y esto nos deja crear leyes propias. No quiero avanzar mucho sobre este punto para no arruinarles la historia, pero es una posibilidad que siempre conviene que la realicemos lo más rápido posible.

Lo más distintivo del mapa es que no tenemos caldera o generador, por lo que hay que buscar nuevas formas de calentar a nuestros habitantes, una opción son una especie de estructuras que consumen carbón individualmente, aunque no son muy rentables al principio. Lo central del juego es cooperar con otros asentamientos, por ejemplo cuando exploremos encontraremos una comunidad de agricultores que nos darán comida a cambio de recursos o que los ayudemos en algunos casos. De hecho es la mejor opción ya que podemos tener problemas con Nueva Londres y esto hace que sea la única opción de sobrevivir.

No es nada fácil administrar los recursos en On the Edge, nos faltará de todo siempre, e intentar cumplir los favores a los asentamientos nos vaciará literalmente. Básicamente recolectamos, juntamos y enviamos recursos, obvio podemos evitar hacer esto pero nos va a complicar la etapa final del mapa si no llevamos buena relación con los asentamientos. Por otro lado tendremos ciertas elecciones morales que decidir, entre ellas por ejemplo la comunidad agrícola que encontramos está enferma, podemos optar por dejarlos usar sus aguas y hierbas «medicinales» o instalarles un puesto médico y evitar que contagien a nuestros ayudantes. Claro está que cada decisión que tomemos tiene consecuencias, y dependiendo que optemos nos beneficiaremos en un momento o podemos perjudicarnos. 

La jugabilidad que nos brinda este DLC es interesante pero muy complicada, el cierre a este mundo sombrío de invierno polar es un toque distintivo sin lugar a dudas. Creo que On the Edge brinda una experiencia única, muy difícil pero con ese mensaje de esperanza que brinda Frostpunk. Si bien el DLC puede ser algo corto y las elecciones morales no son tan trágicas como en el mapa original de la historia, lograron crear algo totalmente nuevo, con toques de supervivencia que nunca vimos y actualizando el contenido una vez más.