Devolver Digital, el distribuidor de juegos como Hotline Miami, Fall Guys y Loop Hero, junto con los desarrolladores Nerial y Nicolai Troshinsky, nos traen Card Shark una joya que no nos deja de asombrar y no solo con su divertida jugabilidad sino que con su historia atrapante llena de vueltas y sorpresas. El título esta disponible en PC vía Steam, GOG y Epic y en Nintendo Switch.
HISTORIA DESTRÁS DEL DESARROLLO
Nicolai estaba aprendiendo manipulación de cartas, lo que inspiró la idea de un juego sobre trampas con cartas. Entonces conoció a Arnaud de Bock (Pikuniku, Reigns) y juntos, diseñaron el juego con el fin de emular las técnicas de trampa que Nicolai estaba estudiando.
Al desarrollar una historia sobre juegos de azar, Las Vegas inmediatamente les vino a la mente. Sin embargo, se establecieron en Francia del siglo 18 por numerosas razones. Durante la Era de la Ilustración, los eruditos cuestionaron la existencia de poderes superiores y lo sobrenatural. Con una creciente comprensión de la probabilidad, mezclar una baraja de cartas no era dejar la fortuna en manos del destino, podría ser una decisión calculada.
HISTORIA
Como se menciona más arriba, el juego se ubica en Francia en el siglo 18 durante el reinado de Luis XV, nuestro personaje, un don nadie, una persona muda trabajando en un bar que por cuestiones del destino conoce al «Comte de Saint-Germain» un ladrón y estafador que nos invita a ser parte de su próximo engaño.
Por un descuido del conde, nuestra cuidadora y dueña del bar termina muerta y ambos son acusados falsamente de homicidio y sin propiedades ni nadie por quien preocuparte sigues los pasos del conde, quien se convierte en tu tutor y comienza a enseñarte el arte del engaño y los buenos modales.
Conforme avanza la historia, se van revelando varias vueltas y sorpresas que la historia nos tiene preparadas y que todo gira en torno a «Las doce botellas de leche», una historia que parece ocultar algo que puede llegar a desestabilizar la ya frágil corona francesa.
JUGABILIDAD
El juego nos presenta al inicio una jugabilidad simple para las pequeñas interacciones fuera de los juegos de cartas, donde no podremos más que movernos a la derecha o a la izquierda y realizar las acciones disponibles que no son más de una o dos.
Una vez que comenzamos a jugar a las cartas nos encontramos con un juego totalmente distinto, el juego nos recomienda que juguemos con un joystick, y con justa razón, ya que las acciones de mezclar las cartas, pasarlas de una mano a la otra y hacer los cortes para realizar los engaños se van interiorizando en el movimiento de los dedos y para el final del juego ya contamos con una cierta memoria muscular para hacer los trucos.
Pero no solo tenemos que contar con nuestra memoria muscular, también tenemos que hacer mucho uso de nuestra memoria y agilidad mental, ya que si tardamos mucho, nuestros oponentes comenzarán a sospechar y no tenemos más que nuestro cerebro para recordar las cartas que ya usamos o las que tiene nuestro oponente.
El juego cuenta con 28 estrategias distintas, de las cuales no todas son para hacer trampas en el juego de cartas, y como jugadores tendremos que recordarlas todas, ya que en situaciones pueden incluso llegar a salvarnos la vida o por necesidad de las situaciones, debemos de cambiar la estrategia en medio de una partida y todo sin ser descubiertos.
Comenzamos con trucos simples, mirar las cartas de nuestro oponente mientras les servimos vino y luego limpiar la mesa de una forma en especial para indicar de que palo es la carta más fuerte de nuestro oponente, sobra decir que es necesario que nos aprendamos los valores de las cartas de poker para poder hacer esto, cosa que yo tuve que aprender mientras iba jugando.
Sin embargo, las técnicas se van complicando y también se agregan oponentes a la mesa, lo que nos hace comenzar a utilizar técnicas mucho más complejas, como pintar pequeñas marcas en los dorsos de las cartas o usar nuestra cigarrillera que convenientemente dejamos en la mesa para ver los reflejos de las cartas que estamos repartiendo.
El juego siempre nos da la oportunidad de practicar o leer nuestras estrategias si es que lo necesitamos, pero la presión de evitar ser descubiertos solo la podemos sentir mientras estamos jugando y realizando apuestas, donde nos jugamos la riqueza o la vida.
A lo largo del avance de la historia, también contamos con algunas sorpresas como lucha de esgrima, arrojar una moneda sabiendo que va a salir, arrojar cartas de un lado de la habitación al otro o, si somos muy desafortunados, enfrentarnos a la mismísima muerte para quedarnos con nuestra alma.
El título cuenta con varios finales, los cuales a mi parecer fueron un poco decepcionantes, aunque supongo que esta hecho así por una cuestión de ser fieles a la historia francesa, sin embargo, creo que algunas libertades se podrían haber tomado.
ACCESIBILIDAD
Contamos con tres dificultades distintas: El diletante, el jugador y el tramposo, ordenadas de menor a mayor, claramente, haciendo al diletante el jugador casual que solo quiere divertirse y disfrutar de la atrapante historia de Card Shark, y el tramposo, como claramente su palabra lo dice es para personas que quieren un desafío y probarse a si mismos.
Personalmente jugué el con un joystick, ya que el juego lo recomienda, igualmente, decidí darle una pequeña prueba con mouse y mi experiencia fue un tanto mala, los movimientos no se sienten naturales, por momentos se siente que estas moviendo las cartas y por otro las manos de nuestro jugador lo que hace que la experiencia no sea tan fluida como puede ser con un joystick y siento que esto podría ser mejorado haciéndonos usar ambas manos de forma simultánea con el teclado y el mouse.
El menú es muy simple y directo, solamente tenemos nuestras estrategias para repasar y ver en detalle o las opciones gráficas y de sonido del juego, nada del otro mundo con multiples opciones o una navegación dificultosa que lo haga engorroso consultarlo.
GRÁFICOS
Solamente puedo decir maravilloso, el juego es simple pero a su vez hermoso, esto se logró gracias a la experiencia de Nicolai Troshinsky en ilustración, a través de la monoimpresión es que creó este estilo gráfico tan llamativo. El proceso consiste en estampar formas individuales de pintura, antes de superponer esas formas una encima de la otra, formando las escenas pictóricas que se pueden apreciar en el juego.
Todo el tiempo te hace sentir que realmente nos encontramos en el siglo 18 y no solo por los ambientes o las vestimentas de los personajes, sino por los detalles y por como se mueven las cosas o incluso como se comporta la luz que simula de una forma hermosa que nos encontramos viendo una pintura antigua.
El juego al ser tan simple no pide para nada un hardware muy avanzado pudiendo disfrutar de este hermoso juego en computadoras de bajo rendimiento gráfico o incluso con video integrado como Intel HD Graphics o Radeon HD 6550D.
SONIDO
Para acompañar un aspecto gráfico de este estilo y belleza, tanto los efectos de sonido como la música del juego está extremadamente cuidada y también ayuda a dar ambiente y transportarnos al pasado.
Esto no se podría haber logrado sin la participación de Andrea Boccadoro, quien se se unió al equipo de desarrollo para componer y arreglar la banda sonora. Con más de 40 pistas grabadas con una orquesta en vivo, evoca el período de tiempo a través de partituras originales y piezas históricas.
CONCLUSIÓN
Card Shark es un juego excelente que vino a traer ideas frescas a un mercado saturado de videojuegos de acción frenética y constante, con un apartado de audio y video sorprendente y a la altura. Sin embargo, estamos acá para ser objetivos y el juego aunque hermoso y divertido, es algo lento a la hora de contar la historia y por momentos sentimos que no hay un objetivo claro, por ejemplo nos permiten conseguir y donar dinero para algo que no tiene una recompensa (al menos yo no logré encontrar el para que) salvo una pequeña mención al final del juego.
Por momentos se puede sentir que estamos en un tutorial permanente, ya que entre viaje y viaje, el comte nos enseña nuevas técnicas, siento que aunque este es el aspecto principal del juego, un poco de libertad en nuestras acciones o una forma de crear nuestros propios trucos hubiera sido algo muy bien recibido. Este problema de los tutoriales permanentes se exacerba con la imposibilidad de salir de ellos si por accidente presionamos que si queríamos repasar el truco siendo un poco frustrante e incluso haciéndome a mi dejar de jugar por ese día en varias ocasiones.
Como mencioné más arriba en la nota, el juego cuenta con varios finales, los cuales lamentablemente no tienen ningún cambio, salvo dos pequeños párrafos de texto que nos dejan con un gusto amargo, más en casos como el mío, que decidí adentrarme en la historia del juego sin antes leer siquiera quien era el Comte de Saint-Germain o como fue el reinado de Luis XV.
Dejando estas cosas de lado, el juego me pareció divertido y lo disfruté mucho, la inmersión que logra producir con su arte realmente nos hace sentir en esa época y aunque quizá al inicio es un poco extraño como se siente, rápidamente nos acostumbramos y lo tomamos con naturalidad ya que la ambientación es perfecta y se deja disfrutar mucho.
Card Shark es un juego excelente que vino a traer ideas frescas a un mercado saturado de videojuegos de acción frenética y constante, con un apartado de audio y video sorprendente y a la altura de esta frescura pero que por momentos es un poco lento y engorroso.
Análisis
- Precio / Calidad
- Gráficos
- Jugabilidad
- Sonido / Música
- Historia