[Preview] Children of the Sun

Devolver Digital y el desarrollador individual Rene Rother nos traen un nuevo juego indie, que se trata de un shooter táctico en tercera persona con toques de puzle, el cual es llamado Children of the Sun, del cual pudimos probar una versión de preview gracias a ellos en su versión de PC (Steam), donde controlamos a un francotirador con la capacidad de manejar las balas telepáticamente, con deseo de venganza hacia una secta que arruino su vida.

HISTORIA

La historia se cuenta de forma muy críptica, con cinemáticas que están dibujadas en un estilo muy grunge, que más allá de esa estética que presentan las ilustraciones, y dado que el juego no está completo, es imposible deducir que es lo que nos quiere contar aún. De todas maneras, la misma contiene un trasfondo muy interesante, al ser un francotirador con telepatía, el cual desea venganza contra la secta que le arruino su vida.

JUGABILIDAD

En su jugabilidad, está el punto más fuerte. Desde un inicio, deberemos movernos de izquierda a derecha para tomar la mejor posición para disparar. Una vez disparada la bala, esta ira directo al objetivo (que pueden ser los mismos enemigos en el mapa, o coches, pájaros y peces), y si impactamos en un objetivo, la bala se pondrá en un punto muerto y tendremos la chance de redirigir la misma. Si esta impacta en un objeto sólido, esto contará como game over, reiniciando desde cero el nivel.

Además, a medida que avancemos, se añade una nueva mecánica: la capacidad de dirigir la bala hacia cualquier dirección, pero esta misma está limitada a unos pocos metros. Y otra mecánica que se añade es la de poder redirigir la bala desde el aire desde cualquier punto sin haber impactado en un objetivo. Esto se puede lograr al apuntar hacia los puntos débiles de dos enemigos (que están marcados en morado brillante), y que luego se llenaran unos stacks alrededor de nuestra mira, que cuando se nos dé la chance de realizarlo, estará en amarillo, así como también poder llenar más de un stack.

En este apartado, los enemigos no varían mucho tampoco, además de que no hacen acciones muy pronunciadas, como tocar una alarma o ir a buscarnos cuando disparamos a uno de los suyos, ya que solo huyen y nada más, y solo varía la posición de los mismos según los distintos niveles, y solo se añaden enemigos con escudo en toda la partida, y, por lo tanto, la única variedad es la posición de los enemigos y no el tipo de enemigos, aunque este último ayuda cuando hablamos de los niveles.

NIVELES

En esta preview, disponemos de 15 niveles, cada cual se va complicando de a poco, añadiendo edificios, posicionando a los enemigos de maneras muy distintas dentro de los edificios, o que estos mismos se puedan mover, tanto caminando mientras patrullan como en coche, o algunos objetivos se establecen de manera tal que tenemos que ir buscándolos mientras vamos matando objetivos, haciendo de esto un juego de puzles al mismo tiempo. Al final de cada nivel, tendremos un sistema puntuación, además de que se nos mostrará el recorrido de bala que disparamos.

PRESENTACIÓN

El título corre en Unity, siendo su estilo gráfico muy oscuro, con una sensación muy grunge, como mencione con las cinemáticas hechas con ilustraciones. Tiene colores muy apagados, que hacen recordar a luces de neón, con un 3D pixel art que le da ese toque tétrico que le sienta tan bien no solamente a su historia, sino a su ambientación. En cuanto a rendimiento, es realmente muy bueno, no tuve cortes abruptos ni ningún tipo de crasheo intenso.

La música, por otra parte, solo se compone de sonidos de guitarra y sintetizadores que solo ayuda a ambientar los niveles y en cuanto al uso del sonido, si bien ayuda para complementar con esa estética que el juego tiene, no aporta ningún tipo de sensación, ni al disparar ni al impactar objetivos.

CONCLUSIÓN

Para finalizar, Children of the Sun es un título de disparos táctico en tercera persona con ciertos toques de puzles y que posee buen potencial, ya que logra de manera efectiva la bien medida complejidad de sus niveles y la variación en la posición de los objetivos, y las mecánicas de redirección de la bala.

Además, la estética que posee, ayudada por su música ambiental y su apartado gráfico, aportan una sensación tétrica que da la sensación de estar viviendo un mundo de locura.

Pero esto se balancea con una sola variedad de enemigos en los 15 niveles que posee actualmente, que no aporta más complejidad a los niveles de lo que ya hay cuando avanzamos de a poco en cada nivel, y que su sonido no da sensación de satisfacción ni al disparar ni al matar objetivos, y que su historia no está contada de muy buena manera aún, es muy críptica y no deja saber que es lo que está pasando.